Central American families find safety in Mexico. Familias centroamericanas encuentran seguridad en México.
A year ago, lawyers from Asylum Access Mexico met a woman at a shelter near the El Ceibo border crossing between Chiapas and Guatemala. She was 50 years old, well-educated and the mother of a teenage son. Back in Guatemala, she held a high position at an accounting firm and her son attended high school. They lived a good life until a local gang that operated out of her son’s school pinned him for recruitment. When he refused to join, members of the gang kidnapped him several times and tried to force his consent.
His mother was able to get him back through a national child abduction network, but after the third time he was kidnapped, she decided that enough was enough — they needed to get out. She asked the organization who helped her get her son back about fleeing Guatemala and starting a new life in Mexico. The organization provided her with some resources, including information about Asylum Access Mexico.
When she and her son arrived in Mexico, they were threatened with deportation before they could apply for asylum. Luckily she was able to contact Asylum Access Mexico and they helped her review her options and appeal through the district court. The judge was able to have their deportation suspended, but at the cost of being detained. Fortunately, the courts were able to make a decision in only a few days, suspending their deportation indefinitely and granting them freedom from detention.
Afterwards, Asylum Access Mexico lawyers helped them begin the asylum process by preparing them for their interviews and filing evidence, ultimately leading to their recognition as refugees. Since then, the family has relocated to Northern Mexico where the mother was able to find another job in the same line of work and they do not have to worry about their family being torn apart by violence again.
Applying for asylum is a long and complicated process, and without legal counsel, it can be nearly impossible. For instance, there is the case of a Salvadoran woman and her three kids who fled their home country because a gang that operated out of their local church tried to recruit one of her sons. She filed for asylum in Mexico, but her case was denied.
When she tried to appeal through administrative and judicial reviews, her case was denied again. At a loss for what to do next, she contacted Asylum Access Mexico. They were able to review her asylum case and determine that COMAR did not take the necessary steps in processing her application. Instead of interviewing her whole family, they only interviewed her, leaving out the experiences of her children and their encounters with local gangs. Asylum Access lawyers helped the family secure a court date, where a panel of judges were able to listen to her children’s experiences and provide more evidence for their asylum case.
In February, the courts granted the family complementary protection, which allows them permanent residency. Now that they no longer fear deportation, they are able to start their new life in Mexico and begin the naturalization process with the help of Asylum Access Mexico.
Familias centroamericanas encuentran seguridad en México.
Hace un año, abogados de Asylum Access México encontraron a una mujer en un albergue cerca del cruce fronterizo de El Ceibo, entre Chiapas y Guatemala. Tenía 50 años, estudios universitarios y era madre de un hijo adolescente. En Guatemala trabajaba para una compañía de contabilidad y su hijo estudiaba la secundaria.
Tenían una buena vida hasta que una pandilla, que operaba dentro de la escuela de su hijo, trató de reclutarlo. Cuando su hijo se negó a unirse, lo secuestraron varias veces y trataron de forzar su reclutamiento. Su madre lo rescataba a través de la red nacional de secuestro infantil, pero después del tercer secuestro, decidió que la situación no podía continuar y necesitaban salir del país. Le pidió, a la organización que trabajaba en recuperar a su hijo, que la ayudara a huir del país y empezar una nueva vida en México. Recibió información sobre Asylum Access México quienes se pusieron en contacto con la familia antes de su llegada a México.
Cuando ella y su hijo se presentaron antes las autoridades migratorias, fueron amenazados con ser deportados antes de poder solicitar asilo, por lo que los abogados de Asylum Access México presentaron un amparo ante un Juez de Distrito para evitar la deportación y que la familia fuera devuelta al lugar donde su vida corría peligro. Sin embargo, esto no evitó su permanencia en un centro de detención por algunos días. Mientras esto ocurría, los abogados de Asylum Access México los ayudaron a iniciar el proceso de asilo preparando sus entrevistas y reuniendo y presentando pruebas. Ella y su hijo fueron reconocidos como refugiados y se mudaron al norte de México, donde ella tiene un buen puesto de trabajo en su campo de experiencia y ya no les preocupa ser afectados por la violencia.
El proceso para solicitar asilo es complicado y, sin un asesor jurídico, puede ser imposible realizarlo. Por ejemplo, hubo un caso de una familia salvadoreña: una madre y sus tres hijos que huyeron de su país porque una pandilla que operaba dentro de su iglesia trató de reclutar a uno de sus hijos. Su caso fue identificado por una organización en Guatemala y fue referido a los abogados de Asylum Access México. Ella y su familia solicitaron asilo en México, pero inicialmente les fue negado. Al revisar la respuesta que dió la autoridad, verificaron que la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) omitió realizar un paso muy importante dentro del procedimiento, pues solamente entrevistó a la madre, pero no a sus hijos quienes directamente tuvieron los encuentros con la pandilla.
Los abogados de Asylum Access México llevaron este caso ante los Tribunales en donde se ordenó que era necesario escuchar las historias de sus hijos quienes proveyeron más evidencia para su caso. En febrero, con una nueva respuesta por parte de la COMAR, la familia obtuvo protección complementaria. Esto les asegura que pueden permanecer en el país y adquirir seguridad sobre su situación migratoria al poder obtener la residencia permanente y ya no temer a la deportación. Ahora pueden iniciar una nueva vida en su país de acogida y posteriormente iniciar con el proceso de naturalización con la ayuda de Asylum Access México.